Habéis gozado de la piscina toda la temporada de verano y llega el momento de prepararla para el otoño y el duro invierno que se le viene encima para que, cuando vuelva el tiempo en cuestión de seis o siete meses, podáis volver a disfrutar de ella de manera instantánea o sin mucho esfuerzo cuando vuelva el calor. Para ello, hay que llevar a cabo una serie de acciones para mantenerla limpia y en buen estado durante todo el invierno. Estad muy atentos, ya que todos los puntos son clave para preparar la piscina y protegerla durante el invierno.
1. LIMPIA BIEN LA PISCINA
Antes de nada, hay que limpiar bien la piscina, tanto el fondo con un limpiafondos piscina automático, como los azulejos de las paredes laterales. También hay que depurar por última vez muy bien el agua con todos los productos habituales, de modo que quede impoluta. La mayoría de familias no utilizan la bomba de filtraje de la piscina durante los meses de invierno debido a que consume mucha a electricidad. Por lo tanto, cualquier elemento que caiga al agua, la ensuciará y allí permanecerá hasta la llegada del calor. Para evitar esto, te aconsejamos que leas el punto número 3 de este artículo.
2. NO LA VACÍES DE AGUA
Uno de los mayores errores que cometen aquellas personas que se encargan del mantenimiento de la piscina al aire libre es drenar el agua o vaciarla durante el invierno. Esta no es una buena medida a causa de dos motivos importantes: el primero es que el agua ayuda a mantener un nivel de presión contra las paredes de la piscina, por lo tanto, si no hay agua dentro, las paredes pueden colapsar y desmoronarse. Te puedes imaginar que esto es prácticamente imposible de reparar. Lo segundo es por motivos se seguridad. Tanto niños como mascotas, suelen caerse a menudo a la piscina. En el caso de que esto suceda, se pueden lesionar gravemente si no hay agua y la caída puede ser terrible. Para evitar estos accidentes, además de mantenerla con agua, te aconsejamos que pases al siguiente punto, donde hablamos de cubrir la piscina. El tercer motivo importante es, como habréis supuesto, el ahorro de agua. Una piscina son muchos metros cúbicos de agua y, debido a la constante sequía que asola muchas partes de la tierra, es beneficioso para el medio ambiente que ahorremos todo el agua que nos sea posible. La factura del agua también se verá beneficiada.
3. CÚBRELA
Lo más sensato que puedes hacer para proteger tu piscina exterior en invierno es comprar una cubierta para piscinas. Las hay fijas, telescópicas o móviles que hacen que puedas seguir usándolas incluso en invierno. Por otro lado, hay cobertores de piscina, que son como una lona con agarres que sella la piscina y que evita que las hojas y otros desechos caigan al agua, al mismo tiempo que protege de los accidentes y caídas de niños y mascotas. Esto hace también que sea más fácil poder disfrutar de la piscina en menor tiempo cuando venga el calor y evita que bomba se bloquee debido al exceso de suciedad. cuando la vuelvas a encender de nuevo.
Por último, suspira y acepta que vas a tener que dejar de usar la piscina exterior por un tiempo y, que si quieres darte un baño relajante, tendrás que recurrir a una piscina interior, a un jacuzzi, bañera de hidromasaje y, como no, a las saunas, uno de los mayores placeres que tiene el invierno.