Se empieza a notar ya el frío por las noches y echamos mano de ropa de cama que nos abrigue un poco más. Cada persona prefiere un tipo de ropa de cama para dormir calentito: los hay que prefieren mantas suaves pero con cuerpo y los hay que prefieren ligeros nórdicos con fundas agradables.
Si eres de los segundos, estate atento, ya que hoy te vamos a hablar de los tipos de edredones nórdicos que hay en el mercado y de los mejores según tus gustos, necesidades y preferencias.
Nórdicos naturales: Ligereza y abrigo
Cuando hablamos de nórdicos naturales, estamos hablando principalmente de su relleno. El relleno natural de estos edredones es de plumón de pato o de oca, así como de pluma. Estos rellenos naturales se caracterizan por su ligereza, por su capacidad aislante y por su nivel de transpirabilidad. Dependiendo de su gramaje, abrigarán más o menos, pero si lo que buscas es un nórdico ligero y que caliente, el de relleno natural de plumón de oca es el que tienes que elegir, ya que es de gran calidad.
Nórdicos sintéticos: Prácticos y a buen precio
Por otro lado, tenemos los nórdicos de relleno sintético, que también se pueden llamar nórdicos de fibra. Dependiendo de la fibra que se utilice en su fabricación, resultará un nórdico de menor o de mayor calidad. Normalmente, suelen ser de microfibra, que tiene ligereza y transpirabilidad, así como que también hay muchos con relleno de fibra hueca siliconada.
En general, los nórdicos de relleno sintético tienen la ventaja de que son resistentes, duraderos, más prácticos, ya que se pueden lavar en la lavadora y, por qué no lo decirlo, más baratos que los naturales.
Nórdicos de verano: Para personas calurosas y veranos frescos
Sí, aunque parezca un oxímoron, hay nórdicos de verano. Si vivís en una zona del norte de España donde refresca en las noches de verano, un edredón de bajo gramaje que esté entre 120 gr y 250 gr es la mejor opción. También lo recomendamos si eres una persona muy calurosa o que suda mucho por las noches, así como si vives en una zona del mundo poco fría, donde las temperaturas se mantengan sobre los 20º C.
Nórdicos hipoalergénicos: Para alérgicos
Los plumones de rellenos naturales de plumas o plumones pueden parecer los mejores, pero no lo son, especialmente si sufrís alergias. En ese caso, os conviene o bien un edredón nórdico de fibras naturales como la seda o el bambú, o bien un edredón sintético. La cuestión es que estén libres de ácaros y tengan una buena transpirabilidad.
Nórdicos con fundas bonitas: Para dormitorios donde la decoración importa
No queremos acabar este artículo sin hablar de las fundas de edredones. Una de las principales razones por las que se eligen los edredones nórdicos es por su apariencia estética, por lo general, mucho más moderna que una manta o una colcha, que por sus texturas y diseños, suelen tener un aire algo anticuado.
Por lo tanto, si lo que quieres es una cama con una ropa de cama bonita y actual, sea cual sea el diseño (geométrico, de colores lisos, de flores, de estampados étnicos…), un edredón nórdico con una funda adecuada es lo mejor para tu cama.
Por lo tanto, el mejor edredón nórdico para tu cama es el que mejor se adapte a tus necesidades, teniendo en cuenta si eres una persona friolera o calurosa, alérgica o no, así como el que mejor se adapte a la vivienda, dependiendo de su temperatura en las distintas estaciones del año y de su estética. ¡Esperamos haberte ayudado y que disfrutes con el mejor edredón!