Las casas de madera son un tipo de construcciones que vuelven a estar de moda. Son muchos los beneficios que tienen este tipo de construcciones. Es por eso que en este artículo vamos a explicarte cuáles son las principales ventajas que tienen las casas prefabricadas de madera.
La madera es ecológica
Uno de los aspectos por los que la madera es la preferida entre la gente es porque se considera un material ecológico. Una de las principales ventajas es que la madera que se coge de los árboles es la misma que se utiliza para las casas. Sí que es cierto que hay un proceso para dejarla perfecta para la construcción, pero también es verdad que este es mucho más ecológico que el que se invierte en otro tipo de materiales como el ladrillo o los metales.
Además, otro de los beneficios de la madera es que la mayoría de empresa que emplea este material para la construcción se encarga de replantar los bosques. Este es el caso de Maestro Casas, que tiene programas de reforestación en el norte de Finlandia. De esta manera se consigue que no se rompa el círculo de vital de los bosques.
Las construcciones de madera se hacen rápido
Uno de los principales beneficios de las casas de madera es su tiempo de construcción. En menos de un mes es posible contar con una casa de madera. Hasta hay empresas que son capaces de hacerlas en solo dos semanas. Esto es ideal para parejas que, justo antes del verano, deciden que quieren pasar la época del buen tiempo en una madera, por lo que tendrán su nueva vivienda construida justo para el momento en que la quieran disfrutar.
Para que te hagas una mejor idea de lo rápido que se pueden hacer las casas de madera en comparación con otras, piensa que las casas que están hechas con ladrillo pueden tardar hasta 6 meses en acabarse, lo que significa que como mínimo son 6 veces más lentas que las de madera.
Las casas de madera son aislantes naturales
Una de las principales ventajas de este tipo de materiales es que cuentan con unas propiedades que aíslan la temperatura del exterior. Es por eso que, durante los fríos meses de invierno, las construcciones hechas con madera son capaces de aislar las frías temperaturas del exterior y mantener un cierto calor en el interior, con lo que las casas no se tienen que calentar tanto como las de ladrillo u otro tipo de materiales.
Esto es algo que también pasa en verano, pero a la inversa. Las casas de madera son capaces de mantener un ambiente fresco en el interior de las casas mientras hace calor fuera, por lo que no es necesario utilizar ventiladores o aire acondicionado para refrescarlas.
Aparte de ser un aislante perfecto del calor y el frío, la madera también tiene unas propiedades que aíslan el ruido. Es por eso que son unos espacios perfectos si se está buscando tranquilidad.