¿Vives en un piso o casa que lleva construida más de veinte años y nunca ha sido renovada? Quizás ya estás notando que le hace falta una reforma para que se adapte a las nuevas necesidades y a las nuevas tendencias estéticas. Quizás tu caso es otro, quizás has heredado o comprado una vivienda y necesitas personalizarla y actualizarla para hacerla tuya, única y personal. Para ambos casos, lo mejor es una reforma integral, aunque creas que con arreglar baño y cocina puede ser suficiente, normalmente se queda a medio camino.
Hoy te vamos a contar cómo planificar una reforma integral para que sea un éxito y obtengas justo lo que deseas. Todas las imágenes que vamos a ver a continuación son de proyectos de Modrego Interiors, una empresa de Barcelona especialista en reformas integrales desde 1985 y que es un ejemplo impresionante de cómo se tienen que hacer las cosas. ¡Vamos a ello!
Define bien el tipo de reforma que quieres
Antes de empezar, piensa bien en el tipo de reforma integral que quieres para tu vivienda, si simplemente se trata de una modernización de instalaciones y decoración o si quieres ir más allá, es decir, si deseas redistribuir los espacios y volver a instalar el sistema de electricidad y fontanería. Tener claro estos aspectos es importante a la hora de comunicar a los arquitectos qué es lo que esperas de esta reforma.
Un buen arquitecto y un buen interiorista te van a ayudar a analizar el espacio y redefinirlo en el caso de que quieras una reforma donde se contemplen nuevos espacios y una redistribución. En este proceso se van a tener muy en cuenta los puntos de luz natural, dónde si sitúan las tomas eléctricas y de fontanería y de planificar sus nuevos puntos de ser necesario y te ayudarán a escoger los mejores materiales y acabados.
Marca un presupuesto y piensa en los imprevistos
El dinero es siempre un quebradero de cabeza y en este punto tienes que ser realista y marcarte un presupuesto realista. Piensa que entran en juego los materiales, los honorarios de todos los profesionales que entran en juego ten en cuenta que casi siempre hay gastos imprevistos, deja un 10 y un 20% para posibles gastos extra. Es decir, si tu presupuesto para la reforma integral es de 50.000€, piensa que se pueden convertir en 55.000€ o 60.000€ a la mínima que haya un desperfecto oculto.
Contrata siempre a profesionales con experiencia
Este debería ser el punto número 1, la verdad, porque es de vital importancia que contrates a profesionales de las reformas integrales con años de experiencia porque serán capaces de ofrecerte un mejor precio tras muchos años trabajado con proveedores, tendrán un equipo sólido, se adelantarán a imprevistos y tendrán muchos más recursos para resolverlos. Piensa que en una reforma integral intervienen arquitectos, diseñadores de interiores, electricistas, fontaneros, albañiles… profesionales de distintos sectores que requieren de una buena coordinación.
Además, asegúrate de que estos arquitectos profesionales que contratas se encarguen de obtener todos los permisos necesarios, de que cumplan todos los reglamentos y de que supervisen la obra in situ de forma regular para ver que todo se está desarrollando según lo planificado.
Esperamos que esta breve guía para llevar a cabo una reforma integral de tu vivienda te haya servido de ayuda y esperamos que todos juntos consigáis un hogar de ensueño.