¿Cuántos capítulos de «La casa de mis sueños» (el programa de los gemelos Scott) o de «Tu casa a juicio» («Love it or List it«) has sido capaz de ver sin pestañear? Es cierto que, cuando vemos esos programas de reformas, nos entran ganas de tirar tabiques a lo loco para mejorar nuestro piso o casa y conseguir un hogar mejor para todos. Pero antes de que cojas el martillo de demolición, párate a pensar un momento y ten en cuenta que, para hacer una reforma vivienda, sin duda, es mejor contar con profesionales del sector que analicen la situación, nos aconsejen de si conviene una reforma parcial o total y de cómo llevarla a cabo según necesidades y presupuesto. A continuación vamos a hacer un repaso de cómo reformar una vivienda, teniendo en cuenta los distintos pasos que se llevan a cabo en este proceso.
EVALUACIÓN DEL ESTADO DE LA VIVIENDA: NECESIDADES Y DESEOS
Lo primero es que tanto tú, como tu familia echéis un vistazo a vuestra vivienda y anotéis aquello que necesita una reforma y aquellos aspectos que deseáis mejorar. Así, cuando los profesionales técnicos visiten la casa, podéis tener claro qué pedirles para que anoten lo que se necesita reformar, así como vuestros gustos decorativos e ideas.
Después, ellos harán un informe completo sobre el estado de la vivienda teniendo en cuenta instalaciones (electricidad, agua, gas…), puertas, paredes, suelos, ventanas, techos, armarios y evaluar qué se tiene que renovar y si se trata de una reforma parcial o de una reforma integral.
PRESUPUESTO DETALLADO
El siguiente paso es que, una vez los técnicos hayan anotado todo lo que hay que renovar en la vivienda, realicen un presupuesto. Tenéis que tener en cuenta que en ese presupuesto tiene que estar todo detallado y pormenorizado para que no haya sorpresas a mayores. En ese presupuesto tiene que constar la calidad de los materiales, la etiqueta en el certificado de eficiencia energética que se conseguirá después de la reforma, la constatación de que el proceso y los materiales son respetuosos con el medio ambiente, las tramitaciones de las licencias de obras necesarias…
PRESENTACIÓN DE CÓMO QUEDARÁ LA REFORMA
Hoy en día la tecnología está muy presente en las obras, incluso en las reformas de viviendas, así que el siguiente paso es que os presenten visualmente cómo quedará la vivienda tras la reforma para que os hagáis una idea bastante formada del resultado y para que podáis cambiar aquello que no os acabe de convencer. Para ello, pueden presentaros el proyecto con infografías, con recreaciones en 3D e incluso con realidad aumentada y con gafas de realidad virtual. ¿Qué pasada, no?
FIRMA DEL CONTRATO: SEGURIDAD Y LEGALIDAD
Una vez hayáis acordado y aceptado el presupuesto y os haya entrado el resultado de la reforma por los ojos, nunca mejor dicho, el siguiente paso es firmar el contrato. Es muy importante que en ese contrato se indiquen fechas de inicio y finalización de obras, los materiales que se van a emplear, las garantías, los seguros de responsabilidad civil, las formas de pago… De esa manera, podréis estar seguros y tranquilos de que todo se va a ejecutar de forma correcta y con respaldo legal.
LA EJECUCIÓN: MANOS A LA OBRA
Cuando se firma el contrato, ya solo queda que la empresa ejecute las reformas, es decir, que se pongan manos a la obra. En este proceso lo más complicado es que se respeten los plazos acordados y que la convivencia entre profesionales y habitantes de la casa sea lo más cómoda y respetuosa posible. Si la reforma es parcial (baños, cocina…), entonces es relativamente fácil. En el caso de que sea una reforma integral, si no podéis quedaros a vivir en otro sitio durante las semanas que duren las obras, entonces es importante que la empresa de reformas planifique bien cada parte de la renovación para que sea posible la vida familiar durante las obras y que haya agua, electricidad y, al menos, un lugar en donde poder descansar o dormir cada día.
Esperamos que estos pasos a seguir para saber cómo reformar una vivienda dejándolo en manos de profesionales os haya servido de ayuda para haceros una idea del proceso, pedir todo lo necesario en cada parte y que, finalmente, las obras lleguen a buen puerto y podáis disfrutar de una vivienda cómoda, actual y acogedora.
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