Cuidados al hacer reformas

Hacer una reforma supone poner la casa patas arriba: cambiar muebles y objetos de sitio, que un espacio de la casa quede inutilizado por un día o más, suciedad acumulada por todos los rincones de la casa… Pero si se planifica y se ejecuta bien, no tiene por qué ser más molesto de lo necesario.

En este articulo os vamos a hablar de algunos consejos y cuidados al hacer reformas en el hogar para que la reforma no se convierta en una pesadilla, en especial con lo que se refiere al tema de la limpieza.

QUITAR LOS TEXTILES

El primer cuidado que recomendamos es quitar los textiles, tanto del área a reformar, como de la casa entera. Estamos hablando de quitar cortinas, edredones, sábanas, alfombras, cojines, etc. y guardarlos en el armario o envasarlos al vacío durante el tiempo que dure la reforma. Así, evitarás que el polvo y la suciedad de la obra impregne todos los textiles de la casa y la tarea costosa de tener que lavarlos al finalizarla.

CUBRIR LOS MUEBLES, SOFÁS Y COLCHONES

Aquellos elementos que no se puedan guardar en otro lugar, como en el trastero, hay que cubrirlos. Ojo, no concentréis en un solo lugar mucho peso, como en el balcón o en la terraza, ya que la estructura de la casa o edificio podría no soportarlo). Lo mejor es cubrir los muebles, así como el sofá, las sillas de escritorio, los colchones, las lámparas y demás, con un plástico, como lo hacemos cuando pintamos las paredes, o con sábanas viejas bien anudadas para que no entre el polvo y la suciedad de la obra.

En el caso de que este cuidado no sea efectivo, que puede ser, lo mejor es contratar Especialistas en limpieza a domicilio para que hagan una limpieza a fondo en cuanto finalice la reforma.

PONER CINTAS EN LOS MARCOS DE PUERTAS Y VENTANAS

Otro tema importante que normalmente se nos pasa por alto son las puertas y las ventanas, que también sufren en esta reforma, en especial los marcos. Por lo tanto, recomendamos cubrirlos con cinta para protegerlos de la pintura o de cualquier líquido que puedan dañarlos, así como de posibles roces al mover los muebles o al utilizar ciertas herramientas.

CERRAR PUERTAS Y ABRIR VENTANAS

Tenemos que tener un poco la idea en la cabeza del carcelero: «Cerrar cada puerta por la que salgamos«, en especial, de la estancia que se está reformando. De esta manera, se evitará que la suciedad de la obra salga de esa parte de la casa y ensucie el resto. Para que quien esté trabajando en ella no se ahogue con el polvo, evidentemente, hay que tener las ventanas abiertas. Esto será fácil si, por ejemplo, se están realizando Reformas integrales en Barcelona o en cualquier otro lugar con un clima benévolo. Si la reforma es en un lugar donde llueve mucho, hay viento fuerte o nieva, se tendrán que buscar otras soluciones.

TAPAR LOS CONDUCTOS DEL AIRE ACONDICIONADO

Esto es súper fácil pasarlo por alto y que se nos olvide, pero si no queremos tener problemas con el aire acondicionado y la calefacción en el caso de que vengan mediante conductos, es esencial taparlos antes de cualquier reforma. Así, se evita que entre el polvo en ellos y que pueda causar averías.

Esperamos que estos cuidados al hacer reformas en el hogar os hayan servido de ayuda y que, al planificarla, tengáis en cuenta el hecho de proteger todos aquellos elementos de la casa, como muebles, textiles, puertas, ventanas, conductos y demás de cara a que la limpieza posterior sea mucho más fácil y nada se estropee.